A medida que el conflicto en Siria entra en su quinto año, Caritas sigue ayudando al pueblo sirio y es uno de los pocos organismos internacionales que todavía trabaja dentro del país. Pero la guerra ha creado una tragedia humanitaria que se extiende mucho más allá de sus fronteras.
Unos 11,3 millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares y 4,8 millones de ellas han huido a otros países, escapando de la violencia y tratando de reconstruir sus vidas.
Siria es la mayor emergencia de Caritas en este momento y hay personal especializado de Caritas Jordania, Líbano y Turquía que está haciendo todo lo posible para ayudar a los refugiados.
Sin embargo, en los últimos 12 meses, la magnitud de la crisis ha adquirido una dimensión global, así como el creciente número de sirios que emigran desde los países vecinos para hacer el peligroso viaje a través del Mediterráneo hasta Europa.
Las Caritas de Francia, Austria, Grecia, Croacia, Italia, Serbia, Eslovenia, Macedonia, Hungría y otros países de Europa, han respondido con rapidez y determinación a la mayor oleada de desplazados que ha visto el mundo desde la Segunda Guerra Mundial.
Caritas, que es la mano amiga de la Iglesia católica que ayuda a los necesitados, está comprometida a salvar vidas y medios de sustento.
El Papa Francisco ha expresado su solidaridad con los migrantes sirios y, en una visita a la isla griega de Lesbos, el pasado mes de abril, se reunió con algunos exiliados en el centro de migrantes de Moria. Invitó a tres familias de refugiados sirios a que lo acompañaran de regreso a Roma.
Esperamos que el mundo preste atención a estas situaciones de necesidad trágica y verdaderamente desesperadas, y responda de un modo digno de nuestra humanidad común
- Papa Francisco, Lesbos (abril de 2016)
“La campaña #peacepossible4syria dice que la guerra en Siria ha provocado 4,8 millones de refugiados y 6,5 millones de refugiados internos. Ayúdenos a concienciar @iamCARITAS”
A través de sus asociados de la Iglesia sobre el terreno, Caritas ha llegado a decenas de miles de familias en Siria, Líbano, Jordania y Turquía. Están proporcionando alimentos, refugio de emergencia, atención médica gratuita, mantas, ropa y artículos para el hogar, así como servicios de orientación y lugares adecuados para los niños, con el fin de que jueguen y aprendan.
Pero el movimiento masivo de cientos de miles de personas ha creado nuevos desafíos para Caritas en Oriente Medio y Europa.
Mientras que Italia ha registrado un número ligeramente mayor de llegadas por mar este año, Grecia es el más gravemente afectado hasta ahora. La situación de los recién llegados es grave: la capacidad en las islas griegas (Lesbos, Quíos, Cos y Rodas) se ha estirado demasiado.
El Papa Francisco ha evidenciado la ayuda que Caritas ha ofrecido a los sirios, independientemente de su origen étnico o religioso, como una manera de contribuir a la paz. Se insta a la gente a hacer más y se ha pedido que todas las parroquias de Europa acojan a una familia.
Caritas Internationalis está trabajando con los gobiernos europeos y las comunidades católicas, para recibir a los refugiados, mientras que también trabaja por la paz en sus lugares de origen.
El mejor regalo que podemos hacernos unos a otros es el amor
- Papa Francisco, en su visita al campamentos de refugiados de Moria, en la isla griega de Lesbos (abril de 2016)